Job-vialidad

había en el país de Us, un hombre bueno, recto, honrado... rico, pero generoso.
porque no todos los ricos son generosos, de hecho para ser rico es requisito no ser generoso.
pero este hombre era bueno, recto, honrado... y compartía sus bienes con los que tenían menos, porque siempre hay quienes tienen menos.


en el cruce de dos caminos, en un bosque, se juntaron dos vagabundos a filosofar:

-¿de dónde vienes?

-de acá, de allá, de todos lados...

-tengo un secreto para compartir contigo viajero:
la gente que tiene fe, verdadera, inquebrantable
la gente de cuyo sueño es dueña es tan fuerte y prepotente como para rechazar todo el mundo exterior y sus dagas afiladas
sus espinas, sus faltas de sentido, sus sentidos embotados, sus desequilibrios crónicos, sus flaquezas pestíferas, su fealdad
el asco...
esa gente puede
puede quedar por fuera, todo puede quedar por fuera si un hombre
si una mujer tiene fe
tiene un sueño que lo arrebate a todo.
este es mi secreto, te lo doy en la palma de tu mano, viajero desconocido
para que lo lleves
por el mundo y lo coloques en la palma de otro viajero como lo hago yo, ahora, contigo
que la llama no expire
que no muera esta verdad.

-¿tan seguro estás de que eso es una verdad viajero?
¿y que pasa si ese alguien no puede? si el sueño se pincha en la esquina, si se desinfla el cuerpo o peor, si la hinchazón hace que no haya lugar ni para el alimento,
(ni para el aliento)
¿qué pasa si ese hombre, esa mujer miran para abajo y ven que en nada se sostienen?
...si descubren que las ideas están hechas de nada
si el espíritu termina por ser una tela rasgada, una lata rota, una nota desafinada equivocada y mal parida, ¿qué pasa hermano, si de la nada nada viene?
¿qué pasa si descubrís que con tu verdad hermética estás solo
y que todo lo que te rodea sos vos mismo?
¿tanto te puede la masturbación?

-ay viajero, ay viajero...
parece que sos sabio y prepotente, ¿será que estás cuidando una verdad vos también, será que vos también tenés una idea sobre lo que nos está pasando?
aferrarnos a una idea nos hace pobres a las demandas de la manada del mundo, es cierto,
pero con nuestra pequeña única idea,
en el orgullo que nos da nuestra humildad en la altura de lo bajo en la eternidad del tiempo que pasa
somos fuertes
y es el secreto de la vida misma,
hermano...

-¡basta! son sólo palabras...
no me interesa tu viento, ni tu secreto de viejas agoreras, si para vos es tan importante tu alma como tu idea, apostemos, tu alma, a que tu idea es falsa
cuando un hombre se ve llevado por el miedo
la desesperación de
todos los miedos huracanados,
los más lejanos y los más cercanos
-que son los que anidan en el cuerpo-
ninguna idea puede resistir
cualquier idea se rompe ante el miedo hermano mío
apostemos
a que tu idea es mentira...

si la libertad existe
las posibilidades son 50 y 50
¿no?

¿apostamos?