sin aire: mi mundo cambió, tuvo hendiduras y seri0s hundimientos (sin condimentar) en algunos costados, en los omóplatos Ss y en alguna que otra idea que andaba por ahí -las alas siguen intactas, eso sí-, me falta una costilla, se me traba la lengua cuando quiero hablar otra, mis ojos no se abren como antes, ahora dispares, no calculo bien ni esto ni lo otro, y eso me trae consecuencias, amargas, fatales a veces, mi mundo se hizo de una forma no formal ni argumentada como antes, ahora tengo estrellas, sí, constelaciones, pero los argumentos y contradicciones se hinchan, me quitan el gusto y las ganas, me arrebolan las mejillas y explotan (me), en el mejor de los casos, más precisos e incisivos, más intensos ya que no tienen cárceles con qué socorrerme, ni puertas de emergencia, mi cuerpo es errante, distinto, suelto, me tiñe y sacude mis sueños mucho más, pero ya no tiene la gracia ni la inocencia...